ODALIS BAEZ
PEDERNALES.-
El mercado
binacional o fronterizo volvió este lunes a dividirse entre ambos territorio
dominicano y haitiano, tras un impase de reclamo desde hace varios días de la
municipalidad del poblado de Anse-á-pitre que dirige el alcalde Harry Bruno, de
querer establecer el mercado fronterizo en su territorio lunes y viernes de
cada semana, como se ha establecido hace varios años
Este lunes ambos
lados permanecían vigilado por militares adscrita al CESFRONT y del otro lado en la salida del poblado haitiano por
vigilantes de medio ambiente que hacen las veces de policía haitianos.
www.realidadesdepedernales.com observó que en la puerta de acceso con el poblado haitiano de Anse-á-pitre y
este lado, soldados estaban apostados como medida preventiva, mientras soldados
del ejército y migración dominicano devolvían a los haitianos que eran localizados en las
calles y lugares de la población y trasladados en camionetas de esas
instituciones estatales y llevados a la puerta del poblado de Anse-á-pitre-Haití, de
donde mayormente son nativos los que cruzan a territorio dominicanos, parte de
ellos braceros agrícolas y que trabajan en construcciones.
Según se supo en
la estructura construida en el lado
haitiano,algunos dominicanos en medio de la inseguridad han cruzado, unos a
comprar productos y los llamados pepe y otros a ejercer el comercio libre,
donde dijo que el síndico haitiano Harry Bruno tiene casetas creadas para que
comerciantes dominicanos crucen a vender productos manufacturados y agrícolas, pero
la gran mayoría rehúsa no pasar a ese territorio por temor a que en Haití no
existe seguridad.
El viernes pasado la
misma situación se registró, esta vez guarda parque de medio ambiente que al
parecer hacen las veces de soldados no dejaban cruzar a sus paisanos a este
lado dominicano, como forma de represalia, para presionar a las autoridades de
Pedernales a que permitan que el mercado dominico haitiano labore en su
territorio donde se cree no hay garantía.
Las mayorías de los comerciantes
de ambos lados han manifestado su posición de no permitir que el negocio
bilateral se divida en dos, por entender que las mercancías y productos caerían
en el contrabando por caminos oscuras diferentes a cómo se maneja el mercado
fronterizo dos veces a la semana.
MERCADO BINACIONAL
Sin embargo en la
estructura del mercado binacional construido para esos fines, se encontraban
ejerciendo sus negocios comerciantes dominicanos y haitianos que residen en
sectores de Pedernales, el municipio de Oviedo, Enriquillo, paraíso, Chene, Polo
de Barahona y otras y comunidades como Ávilas, Aguas Negras, los Arroyos, Mencia,
la Altagracia y las mercedes.
Esos comerciantes
que además llegan a vender, compran algunos productos para vender en sus comunidades como forma de
supervivencia humana, lo que por este lado se ha hecho una costumbre.
Al ser abordado
soldados del Cesfront sobre si se permite la compra de algunos que otro sáquito
de Arroz de 50 libras para las familias y otras mercancía precisaron que eso
era normal y que no había ninguna restricciones al respeto.
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