Quito, (PL) El II Foro Parlamentario Beijing más 20, celebrado en Ecuador, devino escenario propicio para que diputadas de ocho países latinoamericanos unieran sus voces contra la desigualdad de género y debatieran cuestiones relativas a la situación femenina.
Legisladoras de Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Panamá, Perú, Nicaragua y Ecuador mostraron sus inquietudes acerca del tema junto a representantes de diversas organizaciones y de la agencia de Naciones Unidas ONU Mujeres.
La representante de ONU Mujeres en Ecuador, Moni Pizani, aprovechó el encuentro en la sede del legislativo ecuatoriano para revelar que solo el 27 por ciento de los parlamentarios de la región son féminas.
Actualmente, indicó, las diferencias salariales entre hombres y mujeres de América Latina van del 17 al 24 por ciento en dependencia del país.
Durante un aparte con la prensa, Pizani aseguró que siete de cada 10 mujeres sufren violencia en las naciones del área, a pesar de los avances alcanzados en legislaciones y otros ámbitos de la sociedad.
El evento abordó asuntos desde tres enfoques diferentes: Mujer y Economía, Mujer y Medios de Comunicación y Derechos de la Niña.
En los debates la presidenta de la Asamblea Nacional de Ecuador, Gabriela Rivadeneira, recordó que hace 20 años en Beijing (reunión que dio nombre al foro), los países se comprometieron a luchar por la igualdad, los derechos y el desarrollo femenino.
Pero -aclaró la jefa del parlamento ecuatoriano, no se puede hablar de igualdad de género si no se habla de justicia social.
En el caso articular de Ecuador, dijo, las cifras muestran que seis de cada 10 féminas han vivido violencia de género, ya sea física, sicológica, sexual o patrimonial; y apenas el 27 por ciento de docentes universitarios pertenecen al género.
El cinco por ciento de las adolescentes de 12 a 19 años son madres o están embarazadas, señaló.
En cuanto a los avances alcanzados Rivadeneira comentó que el Parlamento ecuatoriano está formado por un 42 por ciento de mujeres.
Rivadeneira exhortó a la comunidad a cambiar la visión de una sociedad en que la violencia de género es vista como algo natural por patrones culturales del pasado.
La diputada calificó de inaceptable que en el siglo XXI, en la construcción del socialismo del Buen Vivir el tema de la agresividad sea considerado natural o cotidiano.
Esa es justamente la primera lucha que queremos emprender y radicalizar, acotó, no existe completo desarrollo de una sociedad si continúa la violencia de género y se frena el empoderamiento femenino.
Precisó que la erradicación de ese tipo de flagelo es una tarea que corresponde a todos los sectores de la sociedad.
Podemos aprobar miles de leyes contra la violencia de género, pero si no hacemos una conciencia social, si las mujeres y hombres de Ecuador no sensibilizamos acerca de la lucha no podremos generar esa sociedad de la nueva patria y que las futuras generaciones merecen, acentuó.
Ecuador ha dado pasos importantes que han ayudado a fortalecer y sobre todo a visibilizar el tema de género en diferentes normativas legales, rememoró, como la reforma a la Función Judicial y la conformación de Casas de Asistencia para Derechos de la Mujer y la Familia.
En el Foro Parlamentario las diputadas discutieron los avances en la implementación de la Declaración y Plataforma de Acción Beijing, texto resultado de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer celebrada por Naciones Unidas en China en 1995.
La Declaración promueve un mundo en el que mujeres y niñas pueden ejercer sus libertades y validar sus derechos, como el vivir sin violencia, asistir a la escuela, participar en las decisiones y tener una remuneración pareja por igual trabajo.
La cita concluyó con el reto de llevar adelante iniciativas que incidan a escala gubernamental en los desafíos existentes en cada territorio para alcanzar la igualdad de género y el pleno ejercicio de los derechos de la mujer.
*Corresponsal de Prensa Latina en Ecuador
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