El 23 de febrero de
1930, Rafael Leónidas Trujillo, Jefe del Ejército Dominicano en el Gobierno de
Horacio Vásquez, dio un golpe de Estado, y el 16 de mayo del mismo año convocó
a unas elecciones manejadas por él con la que obtuvo el Poder. Trujillo tomó posesión
el 16 de agosto como Presidente de la República Dominicana con Rafael Estrella
Ureña como Vicepresidente; poco tiempo después saldría hacia el exilio.
Trujillo concentró el
Poder en un partido único, el Parido Dominicano e inician campaña de persecución
y muerte contra sus opositores. Ordenó acciones como la matanza de 8000
ciudadanos en 1937 con el pretexto de dominicanizar la frontera, militarizó el
país y se apoderó de las principales industrias: azúcar, ganadería, tabaco,
entre otras.
Realizó falsas
elecciones en la que tenía casi la totalidad de los votos, y designaba a sus
candidatos opositores. También nombró presidentes manipulados por él; como su
hermano Héctor Bienvenido Trujillo.
El gobierno trujillista
organizó las finanzas nacionales, creó el peso dominicano, bancos como el de
Reservas, el Central y el Agrícola, y empresas como los Astilleros Dominicanos
en Haina. Construyó una red importante de carreteras, caminos vecinales,
barrios para empleados y centros de asistencia médica; también creó
instituciones culturales y se estableció la educación gratuita y obligatoria.
En los 30 años de
gobierno de Trujillo se produjeron invasiones de opositores desde Costa Rica y
Cuba, respectivamente, que fueron aplastada y la mayoría de sus miembros fueron
asesinados.
A partir de la segunda
invasión, y ante la debilidad de su gobierno, Trujillo instaló una maquinaria
de amenazas, torturas y terror contra los opositores y sus familiares,
dirigidas por Johnny Abes, que según el poeta y dirigente del PRM, está vivo y coleando.
Durante la tiranía de
Trujillo hubo numerosos muertos y presos políticos, casos como el asesinato de
las hermanas Mirabal, Patria, Minerva y María Teresa, en noviembre de 1960, caso
que impactó a la opinión pública internacional.
Al final de su
gobierno, Trujillo había perdido el respaldo de muchos de sus seguidores, y
enfrentaba un bloque internacional por un atentado contra el presidente
venezolano Rómulo Betancourt.
El 30 de mayo de 1961,
Antonio Imbert Barreras, Huáscar Tejeda y Antonio De la Maza emboscaron el
automóvil del dictador y lo asesinaron.
Autor:Randall Fernández
Cel.
829-993-6195
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