Motoconchistas haitianos cargando pasajeros hacia su país desde el mercado fronterizo
Así se desarrollo el mercado fronterizo este viernes, en las mayorías sin aislamientos y sin mascarillas
ODALIS BAEZPEDERNALES.-
Mercado fronterizo se
desenvolvió este viernes sin el confinamiento y la falta de mascarillas entre dominicanos y haitianos, en medio
de un gran desplazamiento de compradores de la región Sur y del vecino país de
Haití, con un dinamismo económico
diferente a otros días de negocio.
Se notó una
participación activa de comerciantes de ambos lados, mientras visitantes de la
región sur ocuparon en su vehículos los espacios de parqueos del establecimiento
de negocio fronterizo, mientras la vigilancia y control militar permanecía como
ha sido costumbre en la vía del tramo “El Badén” y en la puerta de acceso
a la estructura del mercado dominico haitiano.
A pesar de que comerciantes de la comunidad de Anse-a-Pitre-Haití, pretenden establecer su propio mercado, luego de que concluya una estructura techado de Cinc en las proximidades de la división con este lado, el mercado fronterizo “Puerta de la confraternidad” como se le denominó cuando fue inaugurado hace varios años por las autoridades de ambos lados, construido por la institución Internacional Green Caribe y la Agencia de Cooperación Española seguirá siendo el lugar de los vendedores y compradores dominicanos y haitianos, según lo han expresado
Al negocio bilateral llegan personas de todas partes de la región sur y la parte oeste de Haití a ejercer compras de ropas usadas, tenis zapatos, tanto nuevos como usados con los cuales muchos se ganan la vida revendiendo en sus comunidades, mientras familias con otros negocios pequeños compran productos agrícolas, unos para el abastecimiento familiar y otros para vender al mejor postor y ganarse unos chelitos.
Aunque muchas veces
para las personas que ejercen la compra de productos alimenticios y mercancías le
luce cansón y hasta agitador, cuando en cada puestos de chequeo militar son
requisados por los centinelas que son establecidos como medidas preventiva ante
el narcotráficos, indocumentados y contrabando desde el vecino país de Haití.
Hay que resaltar que
los compradores mayormente de ropas usadas que adquieren en el negocio, en las
mayorías de los casos son para vender en la región sur con la finalidad de
ganarse el sustento de la familia ante la situación económica que padecen
comunidades vulnerables.
En tanto que los
controles militares también son necesario, en las entradas y salidas del
mercado fronterizo es un medio que evita presión al gobierno dominicano y hasta
haitiano, dado que muchos comerciantes que aquí venden sus mercancías y
productos agrícolas, se sustentan económicamente, además de que otros
ciudadanos reciben beneficios cuando son utilizados para ayudarle a vender sus
productos.
En el caso propio de
Pedernales y los pueblos haitianos como Anse-a-Pitre, Banano, Thióte y otros
que están ubicados en la línea divisoria con Haití, muchos productos agrícolas
cultivados en la parte alta de ambos lados son cosechados y vendidos en el
mercado fronterizo, como es el limón, papas, cebollas, remolachas, repollos, gandules
y otros.
En otro orden la gran
cantidad de ropas usadas que son vendidas en el mercado fronterizo son
adquirida en la zona franca del municipio cabecero de Pedernales, mucha de las
cuales son también adquirida por visitantes dominicanos que llegan al negocio
dos veces a la semana
Sin el confinamiento y
en las mayorías de comerciantes y compradores la falta de mascarillas, en medio
del dinamismo económica y muy concurrido, se desarrolló el mercado dominico
haitiano este viernes.
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