La puerta en entradas y salida del mercado,donde además son requisados las personas,motocicleta y vehículos que cruzan cargado de mercancías y pasajeros haitianos y dominicanos |
Por Odalís Báez--
PEDERNALES (Rep.Dominicana).-El mercado fronterizo desarrolló el negocio este viernes normal, pero triplicó las visitas de adquirientes de diferentes partes de la región y el sudeste de Haití, en medio de una gama de mercancías y productos agrícolas que al acercarse el mes de Noviembre comenzaron a venderse en el establecimiento dominico haitiano.
Ropas de todo tipo usadas y nuevas, zapatos, tenis, trastes del hogar así como variedades de productos agrícolas fueron observadas en los cubículos y al granel del negocio bilateral, donde decenas de personas de comunidades de la costa Sur hasta Barahona llegaron a comprar para revender en pequeños negocios.
En tanto que las requisas militar en los puestos de chequeos desde la salida del mercado hasta la carretera que enlaza esta comunidad fronteriza son constante, mayormente después que soldados adscrito al CESFRONT y el servicio de inteligencia C-2 decomisaron 229 libras de marihuana en 23 pacas en una camioneta que pretendían tres individuos que fueron apresados sacar en bolas de ropas camufladas por la carretera Pedernales Barahona.
Este viernes decenas de bultos de ropas usadas fueron desenrollados por soldados establecidos en chequeos próximo al badén de la carretera que va al mercado fronterizo, para evitar la penetración de estupefacientes donde eran vistos soldados requisando motocicletas, vehículos y deteniendo a nacionales haitianos que viajan semanalmente de comunidades de los Arroyos, la Altagracia y las mercedes.
Pese a las requisas el mercado sus actividades comercial funciona normal entre ambos lados, hay que destacar que la mayorías de las ropas usadas que se comercializa en el negocio fronterizo es adquirida en la zona franca de Pedernales, de donde comerciantes haitianos compran y luego la trasladan a su territorio y posteriormente la venden lunes y viernes de cada semana en el establecimiento dominico haitiano.
Según se estima el mercado fronterizo ha servido entre familias para abaratar los costos de la canasta familias, lo que ayuda a la alimentación con la comprar de productos agrícolas y manufacturados que están siempre a la veta del negocio en este lado y Haití.
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