¿Haces mucho ejercicio físico? ¿Te pasas todo el día sentado? ¿Tienes hambre a menudo? ¿Sufres anemia o te sientes cansado? ¿Tienes estreñimiento?
En este artículo te presentamos diferentes desayunos, todos ellos saludables, para que elijas el que más te gusta y, sobre todo, el que más te conviene.
Macrobiótico
La alimentación macrobiótica procede de Japón y se basa en los conocidos principios complementarios del Yin y el Yang. Propone una dieta basada principalmente en el cereal integral y, por ese motivo, es una excelente propuesta para desayunar.
Además, la macrobiótica también sugiere empezar el día comiendo alimentos salados, ya que los dulces provocan picos de glucosa que nos causan ataques de hambre a media mañana.
El desayuno macrobiótico es muy simple:
Arroz integral: Es fundamental que sea completo, rico en fibra.
Gomasio: Sésamo en polvo tostado con sal marina, un condimento ideal para el arroz que, además, nos aporta mucho calcio.
Té verde o rooibos: Lo puedes endulzar con estevia.
Este desayuno es ideal si…
Tienes hambre a menudo.
Sufres estreñimiento.
Quieres aumentar el calcio en tu dieta.
Prefieres desayunar alimentos salados.
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